La acidificación del agua potable ayuda a aumentar el estado general de todo el sistema digestivo y ayuda a mantener un estado óptimo del intestino promoviendo una mejor asimilación de los nutrientes.
La acidificación es una manera adecuada de activar y seleccionar la flora bacteriana beneficiosa y de inhibir el desarrollo de bacterias patógenas intestinales. La acidificación dietética puede considerarse como una medida de salud preventiva comparable a la de los antibióticos.
La diferencia fundamental es que los antibióticos impiden el crecimiento de la flora bacteriana, mientras que en el proceso de acidificación permite la supervivencia de los microorganismos más aptos para la colonización del tracto intestinal.
Es una ayuda gastrointestinal. Ayuda a preservar la flora bacteriana ya que obstaculiza los efectos causados por los patógenos. Es una mezcla de diferentes sustancias acidificantes útiles para obtener el mayor beneficio de la interacción simbiótica.
Recomendamos
Uso constante en el agua para obtener los mejores resultados.
Ácido acético, ácido láctico y ácido cítrico.
Usar: Se disuelve bien en agua potable.
Dosis: una medida de 1,25 ml por litro de agua potable.
Gotas: 25 gotas por litro de agua potable.
Duración del tratamiento: 3 días a la semana, todo el año.
Dosis de choque: 5 ml por litro de agua potable.
Gotas: 100 gotas por litro de agua potable.
Duración del tratamiento: 2 días.
Mantenimiento: dos veces por semana.
